El Ejecutivo sanciona ley para atraer empresas multinacionales
El Ejecutivo sancionó la Ley EMMA, que crea un régimen especial para el establecimiento y operación de empresas multinacionales para la prestación de servicios relacionados con la manufactura, y esto ha generado muchas expectativas.
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El Ejecutivo sanciona ley EMMA
El Ejecutivo sancionó la Ley EMMA, que crea un régimen especial para el establecimiento y operación de empresas multinacionales para la prestación de servicios relacionados con la manufactura, y esto ha generado muchas expectativas.
La creación de esta zona especial es un paso importante en materia de tecnología y capacitación de mano de obra, debido a la demanda de mano de obra especializada en la materia y la generación de empleos en las empresas al instalarse en la actividad económica.
El presidente Laurentino Cortizo, junto al ministro de Comercio e Industrias, Ramón Martínez, firmó la nueva ley que propone atraer inversiones y permitirá que empresas multinacionales establezcan en Panamá fábricas y plantas de producción para llevar sus mercancías a países de la región.
La iniciativa legal, que forma parte de las acciones del plan de recuperación económica anunciadas por el gobierno, está basada en el régimen SEM, que ha permitido la instalación de 158 compañías multinacionales de este tipo y generado más de 7 mil puestos de trabajo, así como inversiones por el orden de los $1,100 millones, de acuerdo con nota de prensa de la Presidencia de la República.
El Ejecutivo “licencia bajo régimen especial”
“Las empresas que soliciten licencia para operar bajo este régimen especial, deberán asumir el compromiso de transferir tecnología y desarrollar capacidades, ya sea a través de la creación de un centro de enseñanza técnica por parte de las multinacionales en su conjunto o la adopción de programas de capacitación con universidades o centros educativos para el adiestramiento del personal nacional, a fin de integrar la fuerza laboral panameña que requieren las empresas”, se lee.
Este nuevo régimen permite a las compañías beneficiarse de incentivos fiscales, laborales, migratorios y aduaneros que establece la nueva ley, además de capitalizar las bondades de los regímenes especiales ya existentes en las zonas francas de Panamá Pacífico y Colón, entre otras.
La medida refuerza el establecimiento de las empresas dentro de Panamá Pacífico, cuya infraestructura permite el óptimo desarrollo de la industria manufacturera.
En Panamá Pacífico, más de 10,000 colaboradores –de los cuales el 90% es mano de obra panameña– han encontrado una oportunidad de crecimiento en las compañías que decidieron establecerse en el área.
